lunes, 14 de junio de 2010

La belleza

La belleza del cisne
Soñó ser poesía,
Y la belleza de la poesía
Quería ser fragancia,
Y la pureza de la esencia
Añoraba ser pintura
Mientras lo hermoso de la pintura
Quiso ser canto de ruiseñor.

Y lo bello del canto
Pudo hacerse poesía,
Porque la belleza de la poesía
Era la misma de la fragancia
Y la fragancia descubrió
Ser lo que el cisne aneló.

Pues la belleza entendió
Que ella no era poesía,
Comprendió no ser fragancia,
Ni pintura, ni cantor.

La belleza no mora en gargantas,
Ni en colores,
Ni en fragancias.
La belleza no es creada,
Ni la redacto hoy.

La belleza solo alumbra
Al vehiculo armonioso
Que atrae su presencia
Y se plasma en la creación.

viernes, 11 de junio de 2010

La condena del poeta.

Somos prisioneros
Que sonríen tras las rejas,
Somos amantes de la condena,
¡Bendita nuestra condena!
Cantara siempre el poeta,
Hermosa nuestra condena,
Pues de las venas
Se escurre la tinta
Que dibuja cada palabra,
Y las lágrimas inspiran
Las frases que se cantan.

Corazón translucido y de cristal,
Esa es nuestra condena,
La de ver al mundo desolado
Y sangra por cada daga
Que la injusticia allá empuñado.

Esa es nuestra condena
La de amar sin ser amados,
¡Bendita nuestra condena!
De una poesía esbozado.

Siéntanse muy dignas
Todas nuestras musas,
Siéntanse felices
De nublar el corazón
Pues nuestra condena existe
Para despertar la inspiración,
Y esta solo llega
Cuando en el alma hay amor.

¡Bendita nuestra condena!
Pues por ella vivimos
Con tanta intensidad hasta morir,
Esta es nuestra condena
¡La razón para escribir!