Rojo bajo la vista, roja
Roja la bruma sobre la mirada, en la mirada,
Rojo fuego, rojo sangre
Rojo furor e ira incontrolada.
Rojo como la muerte que tanto ansío
Y rojo como tantas muertes que he ansiado,
Rojo como la roza que ha abierto con su ira roja y cruel
Estas venas refulgentes
Llenas de muerte, de rojo y de pasado.
Rojo como el deseo,
Como mil deseos,
El deseo anhelante de no ser,
El deseo vibrante y rúbeo de desaparecer.
Rojo…tanto rojo
Rojo que duele, rojo que llaga
Que crea heridas y las abre una y otra vez,
Rojo que lastima y lacera corazón y piel.
Rojo vibrante como el atardecer
Y tan nostálgico como el amanecer,
Rojo que rasguña la piel dueña de la mano,
Rojo que desgarra la carne viendo correr un rio carmesí
Mientras se lloran fogosas lagrimas al haberlo derramado.
Roja niebla, razón rubí,
Deseo imperioso e irrefrenable
¡De lanzar un desgarrador grito!
…Y al fin por siempre dormir.
